Alvear FBC volvió a gritar campeón. En una final vibrante, cargada de tensión, reclamos y dramatismo, el equipo de Miguel Urreaga conquistó el Torneo Provincial “Alberto Mario Jorge” tras superar por penales 4-3 a All Boys de Santa Rosa. La gran figura fue el arquero Lucas Santucho, decisivo con dos atajadas que sellaron la cuarta estrella del club alvearense.
Una final con el corazón en la mano
El estadio Dr. Ramón Turnes fue escenario de un duelo impredecible. Alvear llegó con la ventaja del 1-0 logrado en la ida, pero la revancha distó de ser sencilla. A los 34 minutos, Gabriel Flores abrió el marcador desde el punto penal tras una mano sancionada a Benjamín Portillo, en una jugada protestada con vehemencia por el local. El zurdo no falló y puso en ventaja a los norteños.
All Boys no se rindió
El Albo fue empujando hasta encontrar la igualdad a los 35 del segundo tiempo, gracias a un potente remate de Federico Ihitsague. En medio del fervor, Portillo debió ser retirado en camilla por una lesión nasal, aumentando la tensión. Con el envión anímico, All Boys llenó el área visitante de centros y, en la última pelota del partido, Agustín Servetto conectó de cabeza para el 2-1 que obligó a definir desde los doce pasos.
Santucho, héroe absoluto
En la tanda, Santucho se agigantó: contuvo los remates de Mirko Parassole y Ramiro Fredes. All Boys anotó a través de Guinchinao, Arzer y Servetto, pero Alvear no falló. Betanzo, Ferreira, Flores y Bertaina mostraron serenidad para sellar el 4-3 que decretó el título.
Datos que dejan huella
Esta edición fue la de menor promedio de gol en la historia del Provincial: 2,24 tantos por partido.
All Boys disputó su novena final, con tres títulos y seis subcampeonatos.
Alvear FBC jugó su sexta definición y ya festeja su cuarto campeonato, consolidándose como uno de los grandes del certamen.
Miguel Urreaga alcanzó un logro especial: se transformó en el cuarto entrenador que es campeón como jugador y como técnico, sumándose a Carlos Del Póppolo, Ignacio Archieri y Julio César Gómez.
El sello de un campeón
En un torneo cerrado, duro y de márgenes mínimos, Alvear FBC construyó su título con orden, personalidad y precisión en los momentos clave. Y cuando hizo falta una figura para sostener la historia, Santucho apareció para atajar el campeonato y llevar, otra vez, el trofeo hacia el norte pampeano.